lunes, 10 de mayo de 2010

De Ryokan. Poemas Zen.

De noche, en la profundidad de las montañas,
me siento a meditar.
Los asuntos de los hombres no llegan hasta aquí:
todas las cosas están quietas y vacías,
todo el incienso se lo tragó la noche interminable.
Mi túnica se ha convertido en un vestido de rocío.
Insomne, camino hacia el bosque...
De repente, sobre el pico más alto, aparece la luna.
Ryokan, poeta Zen. De Gotas de rocío sobre una hoja de loto.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Related Posts Plugin for WordPress, Blogger...